La Pérdida

Soledad

En un día caluroso y con un hambre de esas que ni te dejan pensar, la vi. En su esclavitud de 8 horas diarias y 5 días a la semana, Bella y radiante. Refunfuñando por la sofocante cantidad de trabajo y aun así era hermosa. Pasaron meses desde ese día cuando la vi nuevamente pasar ante mi en una de esas motocicletas compactas y en tono de burla y con un toque de la ridiculez que causan los nervios le dije: “Me llevas” ella contesto “Móntate” y yo le respondí: “No gracias, no quiero morir tan joven” algo que no le agrado mucho y me sentí como un verdadero idiota. Horas más tarde, mientras platicaba con un amigo, la vi nuevamente… Hermosa como siempre, caminado con su cuerpo envidiable y su cara bella. Me recorrió una especie de escalofrió de la cabeza a los pies y viceversa. Solo Dios sabe lo que sentí aquel día cuando su mirada se cruzo con la mía y ya no pude regresar. Entablamos una conversación y no paso mucho tiempo después para que algo fuerte comenzara a nacer. Y nació, grande y fuerte. Ese día nació la más bella relación que jamás tuve. Ella poseía una familia hermosa, una hermana menor muy simpática (por lo menos conmigo), un hermano que se preocupaba por ella y siempre me decía lo muco que ella me quería y por que. Y sus padres, dos excelentes personas, una madre que la amaba tanto que no podía disimular una mirada repleta de amor y su padre… medio charlatán cuando tenía que serlo pero todo un jefe de familia cuando era la ocasión, excelente ser humano. Me sentía tan querido que temía que algún día culminara. Compartimos juntos, reímos juntos, nos ayudamos, hasta vacacionamos juntos, todo era perfecto. Hasta recuerdo el día en que sus padres y yo nos confabulamos para hacerle una fiesta de cumpleaños sorpresa. Que día tan perfecto. Recuerdo también como yo secaba sus lágrimas cuando se sentía triste, recuerdo la forma en que me decía TE AMO. Como siempre pasa algo difícil tenia que entrometerse y probar nuestro amor. Yo sin trabajo (algo que verdaderamente odio) y sin oportunidad de empleo, pero las deudas aun estaban ahí y mi cuenta bancaria comenzó a esfumase tan velozmente que ya ni sabia que hacer, en medio de mi desesperación y con un sueño en mente, decidí abandonarla por unos meses para ir a ganar un poco de dinero a la ciudad “mágica” de Orlando en Florida. ERROR. El peor error de mi vida y aunque mis verdaderos planes eran ofrecerle matrimonio cuando regresara nunca tuve la oportunidad de decírselo. Aun no se si su amor era real y cometió un error, aun no se si alguna vez sintió lastima por mi, aun no se nada. Solo se que mi amor fue real, tan real que decidí viajar kilómetros de distancia y perder lo que habia invertido en mi apartamento, decidí regresar solo con la idea de asegurarme de que todo le este hiendo de maravilla aunque ya no este a mí lado. Decidí dejar de luchar por un trabajo excelente solo para ver su rostro una vez más. Tan solo una vez. Parece una estupidez , pero no, se llama amor. ¿Quien dice que el amor no existe? Lamento arruinar sus teorías pero si, aun existe. Y el mió me lo robo ella y se quedo con el. Ya no siento lo mismo ya no puedo sentir esa emoción al mirar a una mujer, un beso solo me recuerda sus labios. Irónicamente no le guando rencor y solo le deseo éxito, al ver mi vida irse por la borda solo me queda resignarme a su perdida y verla sonreír. Verla feliz.

Pasaran mil cosas mas en mi vida y ya estoy preparado para cualquier situación y a pesar de sentir enormemente el haberla perdido, me siento complacido por que mi amor si fue real.