Regresando a mi mundo, mi isla
Paseando por las nubes y verdes campos
Esos que extrañé en la lejanía
Esos que solo soñaba en mi cuarto.
Un Vaso de escocés y un cigarro
Sentado entre la tertulia que casi olvidaba
Los ojos que acecharon mi vista
Y tu cuerpo que hipnotizaba.
Dos vasos de escocés y tu compañía
Cuando tus palabras calentaban más que la bebida
Ahí cuando comenzaba imaginar tu cuerpo
Fue cuando rozaste el mío con un beso.
Tres vasos de escocés y la partida
Cuando el deseo no resistió los límites
Y termino al borde de un suspiro
Cuando tu cuerpo y el mío decidieron unirse.
Un cuarto oscuro y la iluminación de dos almas
Explorando cuerpo a cuerpo una pasión
Llegando a las puertas del cielo
Convirtiendo una noche cualquiera en un sueño.
La inmortalización de dos deseos.
Tremendo escrito. Mucha pasion y sutileza. Saludos hermano!
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