domingo, noviembre 27, 2005

Volver a nacer

Mientras observo a varios niños divertirse al otro lado de la calle me pregunto: ¿Qué es lo que mueve al mundo realmente? ¿Qué es lo que nos hace falta para ser felices? Ver a esos niños jugar sin ninguna intención de detenerse, sin pensar en nada más, sin la más mínima preocupación, con una sonrisa autentica dibujada en sus rostros, es realmente intrigante. ¿Deberíamos ser niños eternamente? O ¿Deberíamos seguir siendo adultos con responsabilidades, preocupaciones, problemas, deudas y todo ese tipo de estupideces que llegan desapercibidas a nuestras vidas? Aunque recuerdo lo mucho que solía divertirme cuando niño, cuando jugaba y reñía con mis hermanos, no logro recordar exactamente que pasaba por mi mente en aquellos tiempos. Veamos… Estoy seguro que la capacidad de amar de un niño es autentica y mucho mas grande que la de un adulto. La mirada de un niño es genuina, llena de ternura e inocencia, siempre quieren sonreír, una sonrisa llena de alegría que resplandece hasta el más oscuro día. Al observarlos detenidamente pude percibir que no sienten miedo ni preocupación de ningún tipo y al ver a sus padres acercárseles entendí que tienen una mano protectora y el amor que necesitan para sentir tal confianza. Mantuve mi mente en blanco por varios segundos hasta que recordé la sensación de un abrazo cuando estaba triste, de un beso cuando necesitaba cariño, una mano cuando necesitaba ayuda. ¿Y donde quedo todo eso? ¿Acaso por ser adulto no necesito nada de eso? Tengo unos padres a los que amo con todo mí ser, un hermano que me apoya en mi vida profesional y una hermana que es la única que me hace sonreír con cada locura que se le ocurre. Pero aun así me siento vacío, la soledad cada día es mayor. Supongo que todavía necesito un abrazo cuando esté triste, de un beso cuando necesite cariño, una mano cuando necesite ayuda. Recientemente creí haber encontrado esa mano protectora que tanto necesito y una vez más me equivoqué. Caí nuevamente la trampa que mi propia imaginación me prepara y me hace vulnerable. Ya mi corazón esta tan remendado que no soporta una herida mas, ya el sonreír se ha vuelto tan difícil como la más complicada formula algebraica. Tal vez esto sea parte de las complicaciones que vienen al pasar el tiempo en la vida de cada ser humano. Ya se que el amor no es un mito pero si se que algunos deberíamos ser niños otra vez para poder experimentarlo nuevamente. Deberíamos volver a nacer y redescubrir todo aquello que hemos dado por olvidado, amor, paz, tranquilidad, alegría…

Tal vez todos deberíamos ser niños nuevamente.

5 comentarios:

  1. "por eso el alma solo se entrega una vez, despues la vida nos traiciona la confianza y uno nunca vuelve a ser lo que un día fue" tienes razón, deberiamos aprender a volver a nacer... me gustan tus reflexiones, cuidate ya sabes que no te abandono, un abrazote desde aquí, que no te gane el stress ! :)

    aLe*!!

    ResponderBorrar
  2. A mi me encataria ser niña...awwwww...cuanto me gustaria.
    Llegaron recuerdos a mi mente. Lindo post!

    ResponderBorrar
  3. Wow...
    De verdad que me encantó este post!!! Conmovedor y a la vez sabio. Tienes toda la razón, nos hemos olvidado de amar, de entregar nuestro corazón plenamente a aquellos que nos rodean, inclusive a nuestros seres queridos, como lo hacíamos cuando éramos niños.

    Ciao...
    Arquera Silente

    ResponderBorrar
  4. Anónimo10:11 a.m.

    Lindo post!

    yo extraño ser niña, a veces...

    ResponderBorrar
  5. ¿despertamos el postmodernismo? ¿qué crees?

    ResponderBorrar